Bodegas VALDECURIEL (Curiel de Duero, Valladolid)

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Descripción

“LIBRES PARA SER FIELES A NOSOTROS MISMOS”

En un lugar privilegiado del Valle, junto al río Duero, se encuentra una bonita bodega llamada Bodegas VALDECURIEL, justamente en el Km 6 de la carretera Peñafiel-Pesquera y en el término municipal de Curiel de Duero (Valladolid), dentro de la llamada ‘Milla de Oro’ de la D. O. Ribera del Duero.

Fotos del Archivo de la Bodega

Como dicen en la comarca y recalcan a menudo en la bodega, Valdecuriel tiene detrás de sí muchos años de historia, porque: “Retoma una historia de más de 20 siglos en las laderas del valle de Las Pinzas, en pleno corazón de la Ribera del Duero”.

Pero conviene también recordar que lo que hoy son Bodegas Valdecuriel en Curiel de Duero, anteriormente eran conocidas como Bodegas Altogrande. Y remontándonos bastante más atrás, la historia vitícola en esa zona habría que llevarla hasta la familia de Don Pedro Núñez de la Cuesta, quien plantó viñas en el pago de Valdecuriel entre los años 1920 y 1930, de las cuales algunas cepas aún se conservan en producción. La tradición familiar de elaboración de vino se mantuvo, utilizando lagares propios y una bodega familiar excavada alrededor de 1780. Entre 1980 y 1990, con Don Gervasio Granado, se ampliaron los viñedos con nuevas técnicas, dando lugar a una bodega mucho más moderna, Bodegas Altogrande, construyendo también un nuevo edificio al pie de los viñedos. Actualmente, (creo recordar que desde 2021), Bodegas Valdecuriel forma parte del Grupo Muriel Wines, que ha retomado la historia y la tradición de ese magnífico viñedo de Altogrande que está tan bien ubicado en este impresionante valle en el corazón de la Ribera del Duero.

Sin lugar a dudas, el emplazamiento tiene algo especial, porque está justo frente al río Duero con una orientación sur, en mitad de un hermoso valle que le otorga un verdadero refugio frente al clima mucho más severo de las tierras altas. Los suelos son arcillo-calcáreos, pobres pero muy bien drenados, y con un clima continental bastante extremo, de noches frías incluso en verano.

Estas condiciones son ideales para la práctica de una viticultura precisa, rigurosa, consciente y adaptada al medio natural. Un cultivo que, además, se beneficia de tantos años de historia proporcionando un conocimiento ancestral que también en esta bodega quisieran perpetuar. Además, aquí se puede ver (y disfrutar también), como la fauna autóctona vive en libertad en esas laderas agrestes, bajo los riscos y páramos de piedra blanca que conforma un paisaje que parece de otras latitudes.

Por eso algo tan peculiar como la presencia de un ‘Ciervo Alado’ en sus etiquetas no debe ser una elección casual ni fruto del azar, porque como bien dicen hasta en la web de la bodega, esto tiene mucho que ver con el campo y el valle, pero un poco también con la mitología y las historias de algún ermitaño del lugar:

“El nuestro, al igual que el carácter de los animales que pueblan el Valle, es un espíritu indómito y muy apegado a la tierra”.

Ahí en ese valle tan impresionante sinónimo de libertad, bajo esos dos imponentes escarpes de roca caliza, se extienden los viñedos y también las instalaciones de Valdecuriel. El paraje está situado a más de 800-850 metros de altitud y se encuentra a poca distancia de la mítica ciudad, (vaccea primero y romana después), de Pintia. Es este un lugar donde, según los arqueólogos, ya se elaboraba vino en el año 2.500 a.C. Más tarde, en la época romana, el cultivo de la vid se extendió por todas las tierras del altiplano.

Como bien dicen en la bodega, (y no solo en esta, porque es algo que nos han recordado en otras muchas de la comarca, aunque especialmente aquí):

“En nuestro valle de Valdecuriel, los farallones verticales han sido el hogar de distintos pobladores a lo largo de 5.000 años. Desde el Neolítico, se han utilizado las cuevas de la roca caliza. Hasta hace pocos siglos, las misteriosas galerías fueron ocupadas por pastores, agricultores y ermitaños, y hoy son un punto de atracción para excursionistas y amantes de la historia”.

Aquí cuentan con más de 25 hectáreas de viñedo propio, aunque también disponen de una parcela específica y bastante especial con otras 2-3 hectáreas de cepas viejas que van para su vino Valdecuriel-Reserva. Como ya hemos comentado, el viñedo está situado en laderas orientadas al sur, frente al río Duero, en un hábitat ideal para la uva Tempranillo (Tinta Fina), que constituye el 100% de las variedades cultivadas por la bodega.

Todos en la bodega tienen muy claro que son los cuidadores de un valle magnifico y especial, no solo para la elaboración de grandes vinos, también para preservarlo intacto para las futuras generaciones. Lo saben bien cuando dicen:

“En Valdecuriel abrazamos la herencia vinícola recibida con orgullo para reafirmarnos en aquello que somos, una bodega situada en un enclave privilegiado entre los pueblos de Curiel y Pesquera”.

Las elaboraciones de esta bodega son bastante tradicionales. Para la fermentación, el vino pasa por una maceración prefermentativa de al menos 36-48 horas y fermenta a una temperatura controlada entre 23–26ºC con remontados prácticamente diarios. Para la crianza, la bodega dispone de una bonita Sala de Barricas con unas 1.500 barricas de roble francés y americano. Como es habitual, la duración de la crianza va a ser variable, en función del tipo de vino a elaborar. Así para el Roble puede estar entre 7 y 9 meses en la barrica; para el Crianza entre 12-14 meses; y para el Reserva, estará un mínimo de 24 meses en barricas nuevas de roble francés y americano, seguido de 18 meses más de reposo en botella.

Si no he apuntado mal, (espero que no, aunque pudiera ser), actualmente la bodega tiene una capacidad de producción que puede rondar los 400-470.000 kg de uva anuales, lo que se puede traducir en aproximadamente unos 280-300.000 litros de vino.

Decir para finalizar, que el Grupo Muriel Wines es uno de los grandes grupos vitivinícolas españoles, con una especial importancia en los mercados exteriores. Su origen está en Elciego, Rioja Alavesa, donde José Murúa Villaverde fundó una primera bodega en 1926. En 1986, su hijo, Julián Murúa, retomó la actividad elaboradora y creó Bodegas Muriel. Con los años fue consolidando un grupo de marcas y bodegas, primero en Rioja Alavesa y luego después en otras regiones y Denominaciones de Origen.

Actualmente, el grupo Muriel Wines gestiona varias bodegas, la mayoría en Rioja Alavesa: (en la zona de Elciego están: Muriel y Viña Muriel, Viña Eguía, Marqués de Elciego, Finca Montalvillo y Bodegas Luís Alegre y luego la histórica de Ollauri, Conde de los Andes); una de vinos varietales de la tierra (Real Compañía de Vinos, con ese concepto diferente y nuevo de vinos y variedades); una en la DO Rías Baixas (Pazo Cilleiro, en Luar de Arousa, Meis-Pontevedra); y esta de la que estamos hablando hoy, Bodegas Valdecuriel, en la DO Ribera del Duero. Es posible que todavía me falte alguna más, o que recientemente se estén incorporando al grupo, pero las más importantes son estas que he nombrado.

 

LOS VINOS DE VALDECURIEL:

Mucha historia y también experiencia hay detrás, no solo del terruño donde se asientan los viñedos de Valdecuriel, también de los procesos de elaboración y crianza de sus vinos. Toda esa experiencia les permite cultivar la vid con la idea clara de que sus vinos puedan expresar la identidad más auténtica y definida del lugar. Como dicen en la bodega:

“En Valdecuriel cuidamos un entorno único para obtener de él vinos llenos de autenticidad, sabor y placer. Vinos únicos de aromas y sabor profundos, intensos y alegres que muestran su procedencia y hablan de su terruño. Por eso nuestra gama de vinos representa la calidad vitícola de la zona, definida por la expresión frutal, la potencia y la armonía”.

Con una gama de vinos que van desde crianzas hasta tintos robustos, Bodegas Valdecuriel pone todo su empeño y saber hacer para destacar en sus elaboraciones la excelencia y la máxima calidad. En cada sorbo queda demostrado que este es un lugar donde la pasión por el vino se refleja en la copa porque es algo que va dentro de cada botella.

Desde el antiguo Hacienda del Arte, con sus 8 meses de roble francés que sorprendía a los paladares más exigentes, hasta el actual Valdecuriel Reserva, que destaca por su calidad y sabor inigualables, cada botella de los vinos de esta bodega es un viaje sensorial que vale la pena explorar.

Actualmente, las principales marcas (y las únicas que, al menos hasta ahora, yo he probado), de vinos de Bodegas Valdecuriel en el mercado son:

  • Valdecuriel Roble
  • Valdecuriel Crianza
  • Valdecuriel Reserva

De las que hablaremos a continuación con un poco más de detalle, para explicar sus bondades y la enorme calidad que atesoran y que les han hecho merecedores de varios premios, tanto a nivel nacional como internacional:

VALDECURIEL – ROBLE

Variedades: 100% Tempranillo.

Grado de Alcohol: 14,5 vol.

Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 13 – 15ºC.

VALDECURIEL ROBLE es un vino tinto elaborado por Bodegas Valdecuriel con la variedad Tempranillo procedente de sus viñedos más jóvenes ubicados en el valle a 850 m de altitud. Vendimia manual y selección de racimos en viña y escogidos en mesa de selección antes del despalillado. Las uvas son encubadas en depósitos de acero inoxidable, realizan una maceración en frío, y una posterior fermentación alcohólica a temperatura controlada de 25ºC. Fermentación maloláctica en depósitos y posterior crianza en barrica durante un mínimo de 8-9 meses.

A la Vista: Presenta un bonito color rojo cereza muy vivo, con ribetes violáceos. Limpio y brillante.

En Nariz: Nariz Intensa y muy franca dónde predominan los aromas de frutos rojos, flores silvestres, notas de madera, tostados y un ligero toque mineral.

En Boca: En boca aparecen notas de fruta roja y negra sabrosas, especias y toques de regaliz y cacao, con una ligera acidez que aumenta su frescura. Taninos sedosos y pulidos bien integrados. Buena estructura con un final bastante persistente, limpio, potente y muy jugoso.

Seguramente es el vino más directo y representativo del carácter de esta bodega. Va bien con los aperitivos, tapas y entrantes. También con carnes a la brasa, guisos y estofados, pescados al horno, pasta, verduras y arroces.

VALDECURIEL – CRIANZA

Variedades: 100% Tempranillo.

Grado de Alcohol: 14,5 vol.

Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 14 – 17ºC.

VALDECURIEL CRIANZA es un vino tinto elaborado por Bodegas Valdecuriel con la variedad Tempranillo procedente de sus propios viñedos ubicados en el valle a 850 m de altitud. Vendimia manual y selección de racimos en viña y escogidos en mesa de selección antes del despalillado. Las uvas son encubadas en depósitos de acero inoxidable, realizan una maceración en frío, y una posterior fermentación alcohólica a temperatura controlada de 25ºC. Fermentación maloláctica en depósitos y posterior crianza en barrica durante un mínimo de 12-14 meses.

A la Vista: Presenta un bonito color picota, de capa media-alta. Limpio y brillante.

En Nariz: En nariz se muestra expresivo, con aromas de frutas maduras, notas minerales, especias y trufa y con unos suaves toques minerales del suelo calizo.

En Boca: En boca es un vino vivo y muy fino, que se muestra frutoso, potente, lleno y sorprendentemente hecho, con gran equilibrio y unos taninos nobles y maduros. Se aprecian ligeros toques torrefactos con cierta persistencia y con un final largo y placentero que deja en el retrogusto un poso frutal y mineral.

Sin duda se trata de un vino muy gastronómico que acompaña perfectamente una comida completa de principio a fin. Va bien con embutidos y quesos, todo tipo de carnes, pasta, arroces camperos, guisos y estofados, pescados grasos. Incluso con diferentes postres con presencia de frutos secos y/o chocolate.

VALDECURIEL – RESERVA

Variedades: 100% Tempranillo.

Grado de Alcohol: 14,5 vol.

Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 15 – 18ºC.

VALDECURIEL RESERVA es un elegante vino tinto elaborado por Bodegas Valdecuriel con la variedad Tempranillo procedente de sus viñedos más viejos ubicados en el valle a 850 m de altitud. Vendimia manual y selección de racimos en viña y escogidos en mesa de selección antes del despalillado. Las uvas son encubadas en depósitos de acero inoxidable y tras una maceración prefermentativa de 48 horas mínimo, el mosto fermenta a una temperatura controlada de 25ºC con remontados diarios. Posteriormente, el vino tiene una crianza de 24 meses en barricas de roble francés y americano nuevas y un reposó en botella de 18 meses más antes de salir al mercado.

A la Vista: Presenta un hermoso color rubí con tonos rojizos y ribetes morados. Limpio y brillante.

En Nariz: Muy intenso y complejo en nariz, con abundancia de frutas rojas y negras muy maduras, notas especiadas, recuerdos de chocolate y un ligero toque de regaliz, propio de una maduración prolongada. Destaca algún aroma de violeta, que le aporta aún más elegancia.

En Boca:  En boca destaca su suavidad y amplitud. Taninos potentes y bien integrados. Buena estructura y sensación de grandeza noble y distinguida. Post gusto muy equilibrado y persistente que nos refuerza la sensación de estar ante un gran vino.

Como bien dicen en la bodega, “este es el vino apropiado para los sabores más intensos”. Por tanto, ya sea a la brasa, a la parrilla, para presas o para caza, este Reserva potencia los sabores intensos de cualquier asado (cordero, cochinillo). Armoniza perfectamente con carnes rojas, carnes de caza, ibéricos y quesos curados.

 

NUESTRO COMENTARIO FINAL COMO RESUMEN:

Bodegas Valdecuriel, situada en Curiel de Duero, muy cerquita de Peñafiel en Valladolid, es sin lugar a dudas, un auténtico tesoro enológico que merece la pena visitar con tranquilidad y conocer, cuanto más en profundidad mejor. Sin duda, recoge todo el carácter de un valle tan peculiar como el Valle de Las Pinzas, con una tierra intensa y agreste en la que se practica la viticultura desde tiempos inmemoriales…

Con esa ubicación tan privilegiada, entre Curiel y Pesquera, en un lugar tan hermoso como misterioso a orillas de la Carretera Peñafiel-Pesquera de Duero, (km. 6), esta bodega ofrece una experiencia única para los amantes del vino. Porque, como dicen muchos entendidos, estamos posiblemente en unas tierras de las más propicias para el cultivo de la uva Tempranillo, “capaces de producir unos vinos profundos de raíz afrutada”.

Fotos del Archivo de la Bodega

Es por eso que verdaderamente merece mucho la pena darse una vuelta por aquí y comprobar por uno mismo todo lo que este paraje y esta bodega pueden ofrecer. Como habitualmente los sábados y domingos la bodega está cerrada, reconozco que mucha gente, (no es mi caso), no puede visitarla entre semana y eso podría ser un hándicap para algunos. Pero a veces, tratando el asunto directamente con los responsables de la bodega, puede haber soluciones y por eso dejo aquí sus datos de contacto, para que resulte sencillo quedar con ellos y programar algún tipo de visita o tan solo para comprar y probar alguno de sus vinos en cualquier momento:

Página Web: https://valdecuriel.com

Email: valdecuriel@murielwines.com

Dirección: Carretera Peñafiel-Pesquera, km. 6 – 47316 Curiel de Duero, Valladolid.

Teléfonos: 983 88 04 89

 

CRDKEN – JMQ

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