Descripción
‘La ilusión de una familia que va ya por la 3ª Generación: Los BARBERO’
Esta bodega PAGO DE LA OLIVA BODEGAS Y VIÑEDOS, perteneciente al mundo de los llamados Grandes Pagos de España, se encuentra ubicada en la calle Senda Carretas, 41 en la bonita localidad de Tudela de Duero (Valladolid). Como es bien conocido, Tudela de Duero y su entorno, forman parte de la prestigiosa ‘Milla de Oro’, un lugar privilegiado para el cultivo de la vid gracias a su particular microclima y al singular terroir que posee.
Si hablamos de Pago de la Oliva, hablamos necesariamente de una familia, los Barbero, con un proyecto propio que refleja toda la pasión que se vierte cuando la tierra y la viña te enamoran y te hacen partícipe de lo que sienten y de lo que dan. Después de él mismo, son ya dos generaciones más a las que José Barbero Capdevila ha transmitido esta forma de vida y de sentir las cepas y la viña, la viticultura y el campo. Sus dos hijas y uno de sus nietos, (por el momento), la comparten y la impulsan con ilusión y visión de futuro.
Pago de la Oliva es, por tanto, una bodega familiar creada por un verdadero visionario de su época, un apasionado del campo, de la agricultura y sobre toto de sus viñas, que siempre tuvo claro que quería hacer su propio vino. Un sueño hecho realidad hoy, donde el trabajo de más de treinta años dedicado a las viñas ha permitido a José ver con orgullo como tres generaciones trabajan codo a codo en el campo y la bodega y a sus ‘..taitantos’ años lo está disfrutando como nadie.
JOSÉ BARBERO (Foto del Archivo de la Bodega)
La historia de José comienza a escribirse con un chaval sevillano que amaba el campo y recién llegado a Tudela de Duero trabajaba en él de sol a sol. Los mayores del lugar le llamaban “el niño”, ya que recuerdan con cariño un joven que trabajaba el campo con pasión y coraje pese a su corta edad. Y desde el principio él tenía muy claro que lo que quería era tener su viña y producir su propio vino del que sentirse orgulloso.
En el campo buscó las respuestas que la misma naturaleza contaba sobre donde y como hacer las cosas, donde plantar las viñas, como preparar el suelo, etc. Trabajando siempre con ilusión y con una filosofía de vida. Decía: “El único camino posible es hacer las cosas de la mejor manera posible.”
Cuando José decidió plantar sus propios viñedos buscó cuales eran las tierras más apropiadas para el cultivo, por orientación, por tipo de suelo y más factores, pensando en que “el viñedo es un cultivo que tiene que perdurar más que uno mismo”.
Después de mucho tiempo de observación, viendo el comportamiento de las plantas, los árboles, la tierra y el clima, unió a todo eso tres principios fundamentales para elegir el mejor lugar y que, según él mismo reconoce, determinaron la plantación del viñedo:
- Una correcta sub-solación del suelo, para favorecer el acceso al agua de la planta, su oxigenación y que las raíces agarren mejor.
- Definir la orientación de los líneos para buscar una homogénea radiación de la planta y los racimos.
- Evitar plantar con planta injertada, aunque agilice el proceso. Hacerlo tan solo con porta injertos, que una vez que agarran son injertados con Tempranillo por injertadores profesionales.
Hoy en día la bodega cuenta con dos viñedos propios perfectamente identificados, diferentes entre sí y diferenciadores en las características de sus suelos y su producto:
- PAGO DE LA OLIVA, considerada por José como su “Niña Bonita”. Es un Pago conformado como una única parcela de casi 12 hectáreas de viña con la variedad Tempranillo plantado en vaso. Este pago está dividido en dos fincas que están especialmente resguardadas de las heladas primaverales, con una variedad de suelos que hacen particulares y únicos los vinos que se elaboran con estas uvas.
- EL ESPARRAGAL. Un viñedo “de carácter especial”, situado a las faldas de los cerros testigos de La Mambla y la Cuchilla. El Esparragal es una parcela de 5 hectáreas de Tempranillo, con una biodiversidad y equilibrio entre flora y fauna casi mágica. Sus uvas, también de excelente calidad, reflejan la máxima expresión de este terruño: “recompensa de dar lo mejor de uno mismo”.
Para José, al igual que para el resto del equipo de la bodega, los trabajos en campo son quizá los más importantes y a los que ha de dedicarse la mayor atención cuando una bodega quiere elaborar buenos vinos. Esa idea de infinidad de bodegueros de que ‘el vino se hace en la viña’, creo que aquí también la aplauden. Y de entre las muchas actividades del campo, la poda es para ellos una de las más importantes. No la única, pero sí que la colocan en el Top 3 del vitivinicultor. Es algo que tienen muy presente y sobre lo que comentan:
“La poda debe ser puesta en el punto de mira. Como dijo Columella en el siglo I en sus ‘Doce libros sobre agricultura’, es la tarea más fundamental que realizamos en la viña. Prácticas tradicionales de poda que prosperan para sobrevivir en algunos viñedos, generalmente antiguos, manteniendo el secreto de la longevidad de las viñas. Un secreto siempre basado en el respeto a las plantas, entendiendo que las vides son seres vivos que necesitan la debida atención para sobrevivir”.
Y continúan reforzando esta idea añadiendo el ‘Respeto’ a la planta y diciendo:
“La poda es uno de los pilares fundamentales en el cultivo del viñedo. Se poda para controlar la producción y mejorar la calidad, concepto base que forma parte de la filosofía familiar de nuestra bodega. Se poda conociendo las yemas y las corrientes de savia, respetando siempre la cepa. Es por eso que entender el arte de la poda y conocer bien las técnicas son vitales para controlar la planta y conseguir unas uvas de excelente calidad”.
Otro aspecto importante que cuidan mucho es el cultivo, que desde hace varios años, realizan en ecológico. Cuando dejaron de utilizar productos que no fueran naturales, pudieron comprobar evoluciones muy positivas en la planta y siguen en esa línea convencidos de estar creando un ecosistema estable más respetable con la planta y con el medioambiente. Es por eso que dicen:
“Actualmente solo hacemos dos tratamientos, uno antes de la brotación y el azufrado permitido, práctica imprescindible en el viñedo. Saber en qué justo momento hay que hacer estos tratamientos, combinado con una rigurosa forma de hacer las podas de primavera y de invierno, hacen que todo funcione correctamente y el cultivo ecológico sea algo fácil de realizar”.
Como ya hemos comentado, en estas 17 hectáreas cultivan un solo tipo de uva, la Tinta del País o Tempranillo, que miman y cuidan bajo una viticultura ecológica. La vendimia se realiza manualmente en pequeñas cajas de 14 kg con una atenta selección de los racimos en sus puntos perfectos de maduración.
Foto del Archivo de la Bodega
En la bodega la elaboración de los vinos se hace con esmero y atención a cada detalle. Las instalaciones, que gozan de la más moderna tecnología en todos y cada uno de los procesos, se encuentran en una ubicación ideal y también privilegiada y por supuesto, muy próxima a los viñedos para asegurar que los cortos recorridos de las uvas en la vendimia, permitan que lleguen a bodega en las mejores condiciones y sin ser dañadas por el sol y las altas temperaturas. Luego, cuando la uva llega a la bodega pasa por una mesa de selección y se procede al despalillado. Además, el control de la temperatura es fundamental, para no perder las propiedades de la uva, así como la limpieza en todo el proceso.
También en bodega utilizan métodos de elaboración ecológicos, basados en técnicas ancestrales y que les están proporcionando excelentes resultados. Así lo explican en la bodega:
“Cuando empezamos a elaborar nuestros vinos, decidimos que también la elaboración fuera ecológica, de manera, que tenemos certificación ecológica tanto en nuestra uva como en la elaboración de los vinos. Una forma de entender el campo, de conseguir la máxima calidad y de elaborar un producto final libre de pesticidas y químicos nocivos”.
Así son y así trabajan en Pago de la Oliva Bodegas y Viñedos, con la intención de seguir elaborando vinos de gran calidad por otras tantas generaciones.
LOS VINOS:
Todos los vinos de Pago de la Oliva, de una producción limitada, son fruto de la ilusión y meticulosidad con la que se hacen las cosas en esta bodega y que ha sido transmitida de generación en generación, (y van ya tres generaciones). Y son capaces de llevar a una copa la identidad propia de las cepas y de la tierra privilegiada donde se producen.
Foto del Archivo de la Bodega
La calidad de estos vinos está fuera de toda duda y se debe al esmero y dedicación con los que trabaja todo el equipo en cada etapa del proceso, desde el viñedo hasta la botella. Incluso diría que hasta la copa…. Como explican muy bien en la bodega:
“Nuestra pasión por el campo y la honestidad con la que hacemos las cosas tiene como resultado cinco vinos de los que nos sentimos orgullosos: Savia; Coupage; Tonneau Bouquet; Selección y Deja Vu. Cinco vinos elaborados con uva propia 100% Tempranillo de nuestros dos pagos: LA OLIVA y EL ESPARRAGAL”.
A los que habría que añadir ese otro vino ‘Exclusivo’ que anima a vivir tranquilo y sereno como lo hace el campo y que es ya pieza de coleccionista. Estamos hablando de su obra maestra SÉRÉNITÉ. Igual alguna vez tenemos la suerte de poder contar con alguna de esas 666 botellas que alguien guardará a buen recaudo. Aunque como uno cultiva buenas amistades en este mundo del vino algún sibarita tendrá a bien sorprendernos con una cata de primer nivel.
Mientras tanto, daremos algunos detalles de los 5 vinos, muy buenos también, pero más ‘terrenales’, que elaboran en esta bodega.
PAGO DE LA OLIVA – Deja Vu
Variedades: 100% Tempranillo (Tinta del País).
Grado de Alcohol: 14% vol.
Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 7 – 9ºC.
Deja Vu es un vino rosado elaborado en Pago de la Oliva Bodegas y Viñedos con la variedad Tempranillo procedente de un viñedo de más de 30 años ubicado en el Pago Esparragal en Tudela de Duero, plantado sobre un suelo arenoso muy pobre y cantos rodados. Despalillado y ligero estrujado de las uvas que luego se encuban en depósitos de acero inoxidable por unas 4-6 horas. Sangrado del mosto que fermenta en depósito a temperatura controlada de 15-18ºC, permaneciendo sobre sus lías finas durante un máximo de 2 meses. Previo al embotellado, el vino es estabilizado y lleva un ligero filtrado.
A la Vista: Presenta un bonito color rosa claro muy limpio y brillante.
En Nariz: En nariz muestra una gran intensidad aromática con abundancia de fruta roja (frambuesa, fresa), notas vegetales de menta e hinojo y toques florales.
En Boca: En boca es muy fresco y goloso, donde la fruta roja destaca por encima de todo, con elegantes toques balsámicos. Buena acidez, con un final fino y refrescante que deja un poso ligeramente dulzón.
Se trata de un vino ideal para tomar en cualquier momento. Se puede acompañar con todo tipo de tapas y entrantes, arroces, carnes blancas, pescados y mariscos, verduras, pasta, pizzas, embutidos, salazones y quesos.
PAGO DE LA OLIVA – SAVIA
Variedades: 100% Tempranillo (Tinta del País).
Grado de Alcohol: 14% vol.
Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 12 – 14ºC.
SAVIA es un vino tinto Roble elaborado en Pago de la Oliva Bodegas y Viñedos con la variedad Tempranillo procedente de un viñedo de más de 30 años ubicado en el Pago Esparragal en Tudela de Duero, plantado sobre un suelo arenoso muy pobre con abundantes cantos rodados. Las uvas despalilladas tienen una maceración prefermentatica a 12ºC durante 3-4 días. Fermentación en depósitos de inoxidable a temperatura controlada de 20-22ºC con remontados y control fenólico del mosto en maceración de 5 días. Maloláctica de 2 meses en depósito a baja temperatura y removido semanal de lías. Crianza posterior de 6 meses en barricas seminuevas de roble francés de grano fino y suave tostado.
A la Vista: Presenta un bonito e intenso color picota con ribetes violáceos. Buena capa. Limpio y brillante.
En Nariz: En nariz muestra intensos aromas a frutas negras (mora, arándanos), notas florales y suaves toques especiados.
En Boca: En boca es un vino fresco con buena amplitud y estructura, bastante frutal pero con equilibrio. Taninos vivos pulidos y elegantes, y con un final largo lleno de sensaciones aromáticas.
Es un vino que armoniza muy bien con todo tipo de carnes, guisos, estofados, verduras, arroces, embutidos y quesos.
PAGO DE LA OLIVA – COUPAGE
Variedades: 100% Tempranillo (Tinta del País).
Grado de Alcohol: 14,5% vol.
Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 12 – 15ºC.
PAGO DE LA OLIVA-COUPAGE es un vino tinto-crianza elaborado en Pago de la Oliva Bodegas y Viñedos con la variedad Tempranillo, en un perfecto ensamblaje de las uvas procedentes de 2 viñedos de más de 30 años, (el Pago del Esparragal y el Pago de la Oliva) situados en Tudela de Duero. Una vez despalilladas, las uvas tienen una maceración prefermentativa por frío (por debajo de 12ºC) durante 3-4 días. Fermentación con levaduras autóctonas seleccionadas en depósitos de acero inoxidable a temperatura controlada de 25-27ºC, con remontados periódicos y control fenólico del mosto en maceración de 7 días. Maloláctica lenta durante unos 6 meses en barrica con removido semanal de lías y crianza posterior de un mínimo de 10 meses en barricas nuevas y seminuevas de roble francés de grano fino.
A la Vista: Presenta un hermoso e intenso color picota con ribetes violáceos. Buena capa y lágrima densa. Limpio y brillante.
En Nariz: En nariz muestra intensos aromas a frutas rojas (frambuesa, grosella) y negras (mora, arándanos), especias dulces y toques especiados.
En Boca: En boca destaca por su buena frescura y amplitud. Es sedoso con una marcada acidez, buena estructura y potencia. Taninos dulces y con un final aromático y frutal con un marcado toque de regaliz.
Se trata de un vino tinto que armoniza muy bien con carnes rojas, carnes de caza, asados, guisos, estofados, legumbres, embutidos y quesos curados.
PAGO DE LA OLIVA – Tonneau Bouquet
Variedades: 100% Tempranillo (Tinta del País).
Grado de Alcohol: 14% vol.
Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 14 – 16ºC.
PAGO DE LA OLIVA-Tonneau Bouquet es un vino tinto-crianza ideado por esta bodega para rendir homenaje a la sabiduría tonelera que elabora las barricas donde los vinos de la bodega realizan la crianza, Tonneau Bouquet. Está elaborado con la variedad Tempranillo procedente de cepas viejas del viñedo Pago de la Oliva en Tudela de Duero. Una vez despalilladas, las uvas tienen una maceración prefermentativa por frío (por debajo de 12ºC) durante 3-4 días. Fermentación con levaduras autóctonas seleccionadas en depósitos de acero inoxidable a temperatura controlada de 25-27ºC, con remontados periódicos y control fenólico del mosto en maceración de 7 días. Maloláctica lenta durante unos 6 meses en barrica con removido semanal de lías y crianza posterior de un mínimo de 15 meses en barricas nuevas de 225 y 500 litros de roble francés.
A la Vista: Presenta un hermoso color picota con ribetes rubí en capa fina y lágrima densa. Limpio y brillante.
En Nariz: En nariz muestra intensos aromas a fruta roja madura (cereza, frambuesa, grosella), con notas ahumadas y especias.
En Boca: En boca resulta un vino elegante, fresco, equilibrado, sedoso y potente. Buena acidez, taninos muy pulidos y con un final largo y persistente.
Es un elegante vino tinto que armoniza muy bien con todo tipo de carnes (rojas, de caza, incluso carne blanca). También con asados de cabrito, cochinillo y cordero, guisos y estofados, embutidos ibéricos y quesos curados.
PAGO DE LA OLIVA – Selección
Variedades: 100% Tempranillo (Tinta del País).
Grado de Alcohol: 15% vol.
Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 15 – 17ºC.
PAGO DE LA OLIVA-SELECCIÓN es un vino tinto-crianza elaborado con la variedad Tempranillo procedente de una selección de las mejores cepas viejas de un viñedo de 1 Ha del Pago de la Oliva en Tudela de Duero. Una vez despalilladas, las uvas tienen una maceración prefermentativa por frío (por debajo de 12ºC) durante 3-4 días. Fermentación con levaduras autóctonas seleccionadas en depósitos de acero inoxidable a temperatura controlada de 25-27ºC, con remontados periódicos y control fenólico del mosto en maceración de 12 días. Maloláctica en barrica y removido semanal de lías durante 6 meses. Cambio de lías al año siguiente y removido semanal de las mismas. Crianza posterior de 18 meses en barricas nuevas de roble francés de 500 litros.
A la Vista: Presenta un hermoso y profundo color rubí con ribetes tirando a teja. Limpio y brillante.
En Nariz: En nariz muestra intensos aromas a fruta roja y negra compotada, flores azules con notas ahumadas, torrefacto y especias (vainilla, clavo).
En Boca: En boca resulta fresco muy equilibrado, intenso y sabroso. Taninos vivos muy pulidos y un final largo, sedoso y elegante que resulta muy placentero.
Es un vino de producción limitada (menos de 2000ud), que armoniza a la perfección con carnes rojas maduradas, carnes de caza mayor, asados, guisos potentes, ibéricos y quesos curados. También con postres de chocolate y frutos secos.
NUESTRO COMENTARIO FINAL COMO RESUMEN:
Como ya hemos comentado, Pago de la Oliva Bodegas y Viñedos goza de una privilegiada ubicación con sus mejores viñedos situados en unas laderas del Pago de la Oliva en Tudela de Duero. Esta villa castellana conocida como ‘la alegre lágrima del Duero’, forma parte además de la prestigiosa “Milla de Oro”, una zona de gran tradición vitivinícola de donde han surgido grandes bodegas y salido de ellas grandísimos vinos. Desde luego estamos ante un terruño singular por el que los verdaderos amantes del buen vino sentimos algo especial.
Foto del Archivo de la Bodega
Desde el momento en que pones un pie en Pago de la Oliva, te das cuenta de que estás en un lugar especial. La bodega ofrece una experiencia tranquila y relajante, perfecta para quienes buscan desconectar del bullicio de la ciudad. Y esto lo puedes hacer perfectamente aquí disfrutando de un buen vino. Seguramente por eso, Pago de la Oliva ha sido reconocida y elogiada por muchos como una de las mejores bodegas de Castilla y León, y no es difícil entender por qué. Además, también se preocupan por la accesibilidad y por eso cuentan con acceso para sillas de ruedas y aparcamientos adaptados, asegurando, de esta forma, que todos los visitantes puedan disfrutar de una maravillosa experiencia vinícola sin ningún tipo de barreras.
Su combinación de vinos de alta calidad, instalaciones cómodas y un trato familiar excelente, te hacen pasar una jornada memorable y es bastante probable querer volver una y otra vez. Lo hemos podido comprobar porque en los grupos había bastante gente que repetía la experiencia…. Por algo será…. Igual tiene mucho que ver algo tan sencillo como que, además de disfrutar de unos vinos estupendos, con una calidad excepcional, el equipo que lleva las visitas te hace sentir mejor que en casa gracias a su trato cercano y amable.
Dejo aquí los datos para poder contactar con ellos. Bien al teléfono 983 857 627 o en su página web: www.pagodelaoliva.com
CRDKEN – JMQ
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