Bodegas MARQUÉS DE VELILLA (La Horra, Burgos)

Descripción

‘Respeto a la identidad y personalidad de unos suelos especiales para la vid’

Marqués de Velilla, (Grandes Bodegas SL), es una bodega creada por la familia segoviana Hernández de Mercado en 1985. Se encuentra ubicada en un edificio señorial en las afueras de La Horra, justo al lado de la carretera BU-130 que une Sotillo de la Ribera con La Horra, en plena Ribera del Duero Burgalesa.

Aunque no siempre ha estado ubicada en un mismo emplazamiento porque 1987 se establece en Roa (Burgos) donde está situada la sede del Consejo regulador de la Dominación de Origen; pero ya en 1996 se traslada definitivamente a su emplazamiento definitivo actual en el pueblo de La Horra, donde la familia había adquirido en 1989 una de las fincas más espectaculares de la zona: el Monte Villalobón, que según reza, (y nunca mejor dicho), en los escritos, el anterior propietario parece que había sido la congregación religiosa de La Sagrada Familia, que ya tenían alguna viña para uso propio.

Fotos del Archivo de la Bodega

En agosto de 2000 se acomete una obra de ampliación de la bodega para aumentar las instalaciones y dotar a la de tecnología punta, pasando a ser una de las más modernas bodegas en la Ribera del Duero. Marqués de Velilla se asienta sobre tierras recias y fuertes cercanas al río Duero, que junto al clima, a veces extremo por estos lares con cierta altitud, suelen producir unos vinos rotundos y complejos, con carácter y una personalidad inconfundibles y con marcado carácter frutal.

La bodega Marqués de Velilla es propietaria de unas 800 hectáreas de bosque mediterráneo en las que se ubica su especial viñedo, todo propio, que viene a ocupar unas 180 Hectáreas de superficie en la zona del Monte de la Horra (Burgos), y cultivando las variedades: Merlot, Cabernet Sauvignon, Malbec y por supuesto Tinta del país o Tempranillo que es la de mayor extensión.

La filosofía de viticultura de la bodega se basa en el respeto a la identidad y personalidad de los suelos y en el uso de productos respetuosos con la tierra, reconocidos y aprobados en la cultura biológica. Con el objetivo de elaborar vinos con alma y personalidad. Vinos de alta calidad fruto de la tierra y del trabajo de las personas que la cultivan.

“A través de una profunda investigación de nuestros viñedos, de los suelos, de la climatología, la alimentación hídrica y el ciclo vegetativo de las viñas hemos clasificado 18 tipos de terruño distintos con los que trabajamos de forma dinámica”.

Estos estudios los han hecho sobre los viñedos donde cultivan las diferentes variedades de uva que hemos mencionado y que han sido plantadas, cultivadas y tratadas teniendo en cuenta los resultados de esas investigaciones. Los viñedos más significativos de la finca son:

• Carraroa. Son unas 22 Ha de Tempranillo plantadas en 1991. Las gravas y el frescor de esta tierra producen uvas muy apropiadas para el aporte de fruta y vivacidad en los vinos.
• La Vega del Conde. Son unas 16 Ha plantadas en 1991 con las variedades Tempranillo y Cabernet Sauvignon, dividas en 3 parcelas con diferentes tipos de suelo que dan vinos con cuerpo y elegancia.
• La María. Aquí tienen unas 22 Ha, conformadas en 3 parcelas con diferentes tipos de suelo y plantadas en 1994 con Tempranillo, Cabernet Sauvignon y algo de Merlot. Su poco vigor y la buena selección clonal realizada produce unos racimos pequeños, pero muy buenos para poder conseguir con ellos unos vinos de alta calidad.
• Curillas. Lo forman 2 parcelas con diferentes tipos de suelo, para un total de unas 5 Ha, plantadas en 1991 con uvas de las variedades Tempranillo y Cabernet Sauvignon.
• El Frescal. Son cerca de 14 Ha de Tempranillo en 4 parcelas, también con diferentes tipos de suelo que fueron plantadas en 1992 y que son capaces de producir vinos muy potentes, sobre todo en años cálidos y con unos taninos muy redondos.
• El Membrillo. Son 3 pequeñas parcelas para una extensión total de 7 Ha plantadas en 1993 con uva Tempranillo y que producen uvas con mucha aportación de fruta.
• Son unas 20 Ha en 2 parcelas con diferentes suelos, plantadas en 1993 con la variedad Tempranillo. Dicen que cuando las condiciones climatológicas son buenas, salen de aquí los vinos más potentes de la finca. Son vinos muy complejos y con mucha pureza.
• La Picona. 5 parcelas para un total de 23 Ha plantadas en 1995 con las variedades Tempranillo y algo de Malbec. De estas uvas van a salir unos vinos muy potentes y elegantes.
• El Charcón. Con unas 22 Ha de viñedo en 3 parcelas de suelos diferentes plantadas en 1993 con la variedad Tempranillo, capaces de producir vinos francos y directos, con una estructura suficiente para buenas crianzas.
• El Doncel de Mataperras. Entre viñas, pinos, encinas y enebros del terreno, destaca en esta parcela el “Viejo Doncel de Mataperras”. Se trata de un pino centenario con más de 4 metros de perímetro y una altura superior a 23 metros. En la bodega lo tienen claro y por eso de aquí salen los frutos para elaborar su vino más exclusivo, al que han dado incluso su nombre, porque como ellos mismos dicen: “Se trata de un imponente pino que ha sobrevivido a siglos de historia, convertido ahora en símbolo de nuestra bodega”.

 

Dependiendo de la climatología, y aunque ahora, (como viene sucediendo en casi todas las bodegas de nuestro país), las vendimias se van adelantando un poco cada año, lo normal aquí (según nos dicen), es comenzarla a principios de octubre. En cada parcela los enólogos van buscando el tipo de madurez de la uva más adecuada en función del vino que de ahí quieren sacar. Gracias a la cercanía de los viñedos a la bodega, la uva va a llegar muy rápidamente a ella, lo que garantiza la conservación de todas sus propiedades. Además, todo lo planifican muy bien y con suficiente antelación para minimizar los imprevistos y evitar posibles contratiempos. Aquí nada dejan al azar y menos aún la época de vendimia, por eso hacen hincapié cuando recalcan:

“Aquí nos preparamos para poder hacer la vendimia completa en una semana, minimizando así el riesgo ante cambios bruscos de temperatura, lluvias torrenciales, pedrisco, o cualquier otro contratiempo que pueda dañar el producto o modificar sus características orgánicas”.

LOS VINOS:

El desarrollo vitivinícola de Bodega Marqués de Velilla es de concepto cerrado, por eso y como ya hemos dicho anteriormente, utilizan única y exclusivamente uva propia, proveniente de sus propios viñedos y cultivada por sus propias manos, con un joven y experto equipo de profesionales que saben muy bien lo que tienen que hacer con los viñedos en cada época del año.

Foto del Archivo de la Bodega

Por eso los vinos que aquí elaboran son diferentes y todo un referente de calidad, porque al menos los que nosotros hemos probado, son unos vinos tintos profundos, complejos, que quieren reflejar sin añadidos de ningún tipo la personalidad y el carácter de la tierra que los produce y de las manos que la trabajan. Además, cosa que me ha llamado mucho la atención en ellos y que no suele ser muy habitual en Ribera del Duero, es que destaca la fruta por encima todo, incluso en los que la madera debería estar más presente, consiguen aquí hacer una perfecta integración sin taparles la frutalidad, y que en mi caso es de agradecer. Es algo que intentan explicar en la bodega cuando dicen:

“Nuestra bodega, equipada con la última tecnología, nos permite integrar en la elaboración las técnicas más adecuadas para cada ocasión. Tratamos de combinar la sabiduría de los métodos tradicionales y la efectividad de las herramientas de la enología moderna para, en función del tipo de vino que buscamos en cada parcela, desarrollar también un proceso de elaboración diferente. Así, dependiendo de la añada y del tipo de vino a obtener, modificamos la elaboración para buscar la selección más adecuada”.

Marqués de Velilla – Joven

Variedades: Tinta del País (Tempranillo) 100%.

Grado de Alcohol: 14% vol.

Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 12 – 14ºC.

Este Marqués de Velilla tinto es un vino joven elaborado con uvas de la variedad 100% Tempranillo de viñedos propios de la Bodega Marqués de Velilla plantados en las fincas Carraroa y La Bodega situadas en las proximidades de La Horra (Burgos). Vendimia mecanizada y fermentaciones a temperatura controlada en depósitos de acero inoxidable. Sin paso por barrica.

A la Vista: Presenta un intenso color rojo picota con ribetes azulados que denotan su juventud. De capa media, limpio y brillante.

En Nariz: En nariz se muestra intenso y varietal en el que destacan los limpios y francos aromas afrutados de moras y frambuesas junto a recuerdos de regaliz.

En Boca: El paso por boca es fresco, afrutado y redondo. A su vez resulta también amplio y bastante goloso para ser un vino joven. Tiene un largo y agradable final, con muy buena persistencia.

Se trata de un vino que por su juventud y frescura resulta ideal para acompañar buenos momentos de tapeo. Además es muy gastronómico por lo que armoniza bien con casi todo tipo de platos, como carnes, pescados grasos, platos al horno, guisos de carne, calderetas de carne o pescado, embutidos y quesos semicurados.

Marqués de Velilla – Roble

Variedades: Tinta del País (Tempranillo) 100%.

Grado de Alcohol: 14,5% vol.

Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 12 – 14ºC.

Este Marqués de Velilla Roble es un vino tinto todavía joven, aunque con suaves marcas de su ligero paso por barrica. Está elaborado con uvas de la variedad 100% Tempranillo de viñedos propios de la Bodega Marqués de situadas en La Horra (Burgos). Fermentación a temperatura controlada en depósitos de acero inoxidable y posterior crianza de 6 meses en barricas de roble francés y americano, para reposar luego otros 3 meses más en botella.

A la Vista: Presenta un bonito color rojo cereza con ribetes azulados. De capa media, es intenso, limpio y brillante.

En Nariz: En nariz se muestra intenso y muy aromático, destacando la fruta roja (fresa y frambuesa), con buenos toques especiados y notas minerales.

En Boca: En boca es fresco, redondo y estructurado, con suaves taninos, equilibrada acidez, un tanto mineral y ligeros toques mentolados con una buena persistencia final que alarga su presencia en la boca.

Se trata de un vino que armoniza perfectamente bien con todo tipo de carnes, asados, platos de legumbres, estofados, embutidos y quesos de todo tipo.

Marqués de Velilla – Crianza

Variedades: Tinta del País (Tempranillo) 100%.

Grado de Alcohol: 14% vol.

Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 14 – 16ºC.

Este Marqués de Velilla Crianza es un vino tinto que está elaborado con uvas de la variedad 100% Tempranillo de viñedos propios de la Bodega Marqués de Velilla en las Fincas La Picona, El Frescal y El Charcón de las Palomas, situadas en La Horra (Burgos). Fermentación a temperatura controlada en depósitos de acero inoxidable y posterior crianza de 12 meses en barricas de roble francés y americano, para reposar luego otros 12 meses más en botella.

A la Vista: Presenta un bonito color rojo cereza-picota con ribetes violáceos. De capa media-alta, es intenso, limpio y brillante.

En Nariz: En nariz es ciertamente intenso y muy aromático, destacando la fruta negra (mora y zarzamora), madura sobre delicados tostados con ligeros toques especiados y torrefactos.

En Boca: En boca tiene una fresca entrada y un paso muy agradable y sedoso. Elegantes notas tostadas de una buena madera, se entremezclan con la fruta madura en un perfecto equilibrio. Final largo, persistente y también sedoso.

Es un buen crianza que armoniza a la perfección con todo tipo de carnes rojas, carnes de caza, arroces camperos, guisos y estofados de carne, platos fuertes de legumbres, embutidos fuertes y quesos de oveja curados.

FINCA LA MARÍA

Variedades: Tinta del País (Tempranillo) 100%.

Grado de Alcohol: 14,5% vol.

Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 13 – 15ºC.

Elegante vino tinto que poco a poco se va convirtiendo en todo un clásico de Bodegas Marqués de Velilla. Está elaborado con uvas de la variedad 100% Tempranillo procedentes de viñedos de las parcelas La Picona, El Frescal y El Charcón de las Palomas. Fermentación a temperatura controlada en depósitos de acero inoxidable y posterior crianza de 12 meses en barricas de roble francés para reposar luego durante un mínimo de otros 6 meses más en botella.

A la Vista: Presenta un hermoso color rojo cereza con ribetes violáceos. De capa media-alta. Limpio y brillante.

En Nariz: Nariz elegante, un tanto sorprendente y muy equilibrada, donde destacan buenos aromas de endrina y cerezas maduras en licor, con toques florales, terrosos y especiados.

En Boca: En boca es fresco y redondo, con buena acidez, aunque con mucho equilibrio y toques ahumados. Taninos suaves, bien integrados y muy agradables y con un final elegante, largo y persistente.

Es un vino que armoniza a la perfección con todo tipo de carnes (rojas, blancas, de caza), asados de cabrito y/o cordero, guisos y estofados, platos contundentes de cuchara, parrillas, e incluso con algunos postres con buen chocolate.

Marqués de Velilla – Reserva

Variedades: Tinta del País (Tempranillo) 100%.

Grado de Alcohol: 14,5% vol.

Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 15 – 17ºC.

Estamos ante un buen Vino Tinto-Reserva que está elaborado con uvas de la variedad 100% Tempranillo (tinta del País), de las mejores cepas de la bodega Marqués de Velilla en la zona del Monte de La Horra. Vendimia manual seleccionada. Fermentaciones y maceración a temperatura controlada en depósitos de acero inoxidable y posterior crianza de 12 meses en barricas de roble francés para reposar luego durante un mínimo de otros 24 meses más en botella en la pasa de los mejores botelleros de la bodega.

A la Vista: Presenta un intenso color rojo cereza con ribetes teja. De capa alta.

En Nariz: En nariz muestra muy buenos aromas de fruta roja madura nada tapados por los buenos torrefactos y tostados de la madera, ayudados por suaves toques especiados, notas minerales y cacao.

En Boca: En boca es elegante, sedoso y aterciopelado. Presenta buena acidez sin perder equilibrio. Es un vino muy sabroso con buena fruta roja madura reforzada con tostados de buena madera, cacao y minerales. Final muy largo.

Es un vino con muy buena guarda que armoniza a la perfección con carnes rojas curadas, carnes de caza mayor, buenos asados de cordero o cabrito. También con guisos potentes, embutidos ibéricos y quesos curados. Incluso con postres con predominio de chocolate de gran pureza.

DONCEL DE MATAPERRAS

Variedades: Tinta del País (Tempranillo) 100%.

Grado de Alcohol: 14% vol.

Temperatura de Servicio: Recomendamos servir entre 16 – 18ºC.

Estamos ante un elegante ‘Vino de Pago’ de alta expresión de las Bodegas Marqués de Velilla. Está elaborado con una selección de uvas de la variedad 100% Tempranillo procedentes de ‘cepas viejas’ de los viñedos propios, situados en La Horra (Burgos). Fermentación a temperatura controlada en depósitos de acero inoxidable y posterior crianza de 18 meses en barricas de roble francés para reposar luego durante un mínimo de otros 36 meses más en botella.

A la Vista: Presenta un hermoso color rojo rubí con ribetes granates. De capa alta. Limpio, intenso y brillante.

En Nariz: En nariz es intenso y muestra bastante complejidad, destacando elegantes aromas de fruta negra confitada, con notas especiadas, cuero, tabaco y torrefacto y suaves toques mentolados.

En Boca: La entrada en boca es potente y elegante mostrando un gran equilibrio. Aparece al fondo la confitura de fruta negra con recuerdos ahumados, toques minerales y tostados nobles de buena madera.

Es un vino para las grandes ocasiones y disfrutar en buena compañía en ciertas reuniones o celebraciones especiales donde no solo la comida sea la protagonista, (aunque también).

 

NUESTRO COMENTARIO FINAL COMO RESUMEN:

Visitar y conocer Bodegas Marqués de Velilla es otras de las cosas que tenía muchas ganas de hacer y he de decir que ciertamente merece la pena.

De entre las viñas, pinos, encinas y enebros de la hermosa finca que rodea la bodega, sobresale majestuoso el ‘Viejo Doncel de Mataperras’, un pino centenario que ha sobrevivido a siglos de historia y que a día de hoy se ha convertido en símbolo de la bodega. Además, y como ya hemos visto da su nombre al vino más exclusivo de esta bodega.

La Bodega Marqués de Velilla ofrece diferentes actividades de enoturismo para particulares y empresas: visitas a la bodega (mejor llamar y preguntar por si requiriera grupos de un mínimo de personas o cupos ya cubiertos); celebraciones, bodas, cenas de gala, coctails, etc; pero también reuniones de empresa; y como no, disponen de un bonita y completa Tienda de vino. También disponen de lo que en la bodega llaman “El Club Directo”, al que te puedes apuntar, (es totalmente gratuito), para disfrutar de grandes ventajas en la compra de vinos, promociones especiales, eventos para socios, etc.., etc.., y en cualquiera de las otras actividades que ofrecen continuamente.

Como digo, es esta una visita casi necesaria que está llena de buenas y agradables sorpresas que no dejan indiferente a nadie.

CRDKEN – JMQ